En su novela Otros lugares de interés (Alfaguara, 2010) el periodista y escritor Enrique Planas (Lima, 1970) nos cuenta la historia de un joven matrimonio, Verónica y Daniel, que emprende un largo viaje para superar la pérdida de un hijo. Pero en ese viaje Verónica pasa por una serie de experiencias que la hacen abandonar a Daniel y a asumir la personalidad de la esquizofrénica artista Unica Zürn (1916-1970), llegando finalmente a la locura.
Planas vuelve en este relato a los temas y motivos dominantes en sus tres novelas anteriores: el complejo universo de las emociones femeninas, el erotismo transgresor y la duplicidad como principio estructural (los personajes tiene siempre “dobles” o modelos a los que imitan). Pero esta vez el escritor se libra de los excesos de aquellas novelas: la obsesión por lo grotesco, por el lenguaje “de moda”, o el abigarrado despliegue de técnicas narrativas.
Renunciando a aquello que lo hacía uno de nuestros escritores más explícitamente posmodernos, Planas se aproxima a la narrativa de Iván Thays, en especial a la novela El viaje interior, una historia similar y hasta complementaria (Planas se centra en la mujer que abandona a su pareja, Thays en el hombre abandonado). Otros lugares de interés muestra a un autor dejando atrás los errores de Alrededor de Alicia (1999) y Puesta en escena (2002), pero aún en búsqueda de su propia personalidad literaria.
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Entrevistas: Correo, Pedro Escribano, Enrique Sánchez H.,
4 comentarios:
No, pues, si por donde se lo vea Kike escribe mejor que Iván! O sea, su manejo del lenguaje en superior y la compejidad de sus historias, mayor.
No entiendo. ¿La novela es buena o mala? Porque esa comparación con Thays...
estupenda valoración. La comparación con Thays muy pertinente, apenas empecé a leer la novela de planas me trajo a la memoria ese libro romanticón de Thays.
Carlos.
Me gusta la portada, lo del plano cruzado con el cuerpo se parece a al concepto de la caratula de "El sueño de celta" que es un perfil mezclado con un mapa. Pienso darle una oportunidad a éste escritor poco conocido y periodista del Comercio, leerlo a ver que encuentro. Gracias por recordarme ésta novela. Un abrazo.
Mario.
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